Recuento Histórico de
Enfermería en Salud Pública y en la Comunidad
Primeros tiempos
Contrariamente a la percepción de algunos, los
enfermeros profesionales son un campo exclusivamente dominado por hombres
durante gran parte de la historia de la humanidad. Cuando la primera escuela de
enfermería del mundo fue abierta en India en el 250 a. C., debido a creencias
religiosas, sólo los hombres fueron considerados lo suficientemente
"puros" para ser enfermeros.
La enfermería fue principalmente efectuada por hombres
durante el Imperio Bizantino. En la antigua Roma el término
"nosocomial" significaba "hospital en si" procedente de
nosocomi, el hombre que proporcionaba cuidados enfermeros en la antigua Roma y
diagnosticaban enfermedades a sus pacientes.
Según indica Colliere, el origen de las prácticas de
cuidados está ligado a las intervenciones maternales que aseguraban la
continuidad de la vida y de la especie. La alimentación, como necesidad básica
que implica suplencia y ayuda (por parte de la madre o sustituta) en los
primeros estadios evolutivos del hombre es considerada como la práctica de
cuidados más antiguos.
Como consecuencia del pensamiento medieval relacionado con la
Reconquista de Santos Lugares, surgió un movimiento organizado, que cristalizo
con el fenómeno histórico de las cruzadas, las cuales dieron lugar a la
aparición de tres tipos de figuras: el Guerrero, El Religioso y el enfermero. La demanda de hospitales y
sanitarios en las rutas seguidas por los cruzados propició la aparición de las
Órdenes Militares dedicadas a la enfermería: los caballeros de la Orden de San Juan de
Jerusalén, los Caballeros Teutónicos y los Caballeros de la Orden de San Lázaro
de Jerusalén.
El
llamado movimiento Beguino, constituido por «mujeres santas» que cuidaban
enfermos, se diferencia dentro del entramado histórico-cristiano-caritativo
ligado a los cuidados de enfermería fundamentalmente en que no asume los votos
preceptivos de las órdenes religiosas.
Edad Moderna

Entre los años 1500 y 1860, la enfermería tuvo su peor
momento, debido a que la idea predominante era que la enfermería constituía más
una ocupación religiosa que intelectual, por lo que su progreso científico se
consideraba innecesario. El Instituto de
Diaconisas d Kaiserwerth, creado en 1836 por el pastor protestante Theodor
Fliedner (1800-1864), supuso para la
enfermería el inicio de una formación reglada, para enfermeras.
Un Poster de la Cruz Roja
para reclutar enfermeras durante la Primera Guerra Mundial.
En 1860 se inauguró la
Nightingale Training Scool for Nurses (Escuela Nightingale de Formación para
Enfermeras), la cual constituyo una institución educativa independiente
financiada por la Fundación Nightingale. La originalidad del proyecto fue
considerar que debían ser las propias enfermeras las que formasen a las
estudiantes de enfermería mediante programas específicos de formación y
haciendo hincapié tanto en las intervenciones de enfermería hospitalarias como
extrahospitalarias para el mantenimiento y prevención de la salud tanto del
individuo como de las familias.
Donahue, fue la
precursora de lo que hoy se entiende como Enfermería Comunitaria, por medio de
un proyecto que comenzó en Nueva York en 1893 como una organización filantrópica, y
que constituiría la base para el posterior desarrollo de la Salud Pública en
dicho país.

En la Segunda Guerra Mundial, la
enfermería adquirió mayor importancia y relieve. En los últimos días de la
guerra un artículo de Bixler y Bixler en la revista American Journal of Nursing valoraba la enfermería como una
profesión. Los siete criterios para una profesión identificados por estos
autores eran aplicables a la enfermería de la forma en que se practicaba en ese
momento y justificaban la consideración de la enfermería como profesión.
En 1958, Dorothea Orem escribió: «la enfermería es un servicio humano
cuyo aspecto esencial es atender a la necesidad personal de realizar
actividades de autocuidado de forma continua para el mantenimiento de la salud
o la recuperación tras la enfermedad o la lesión». En su definición incluía a
las personas como parte importante de su propia recuperación y al enfermero
como facilitador de su autonomía.
También en 1964, Hildegard Peplau
planteaba que lo realmente profesional en la enfermería era la relación
enfermero-paciente en el aspecto psicodinámico de los cuidados. Consideraba el
cuidado «un proceso educativo que tiende al desarrollo y crecimiento personal»,
con las relaciones interpersonales y la labor educativa como elementos básicos.
Su principal aporte fue destacar la labor comunicativa de la enfermería e
identificar funciones relacionadas con la asistencia en la educación para la
salud y la docencia en el ejercicio de formación de nuevos profesionales.
En 1970, Martha Rogers postulaba que el modelo
conceptual de enfermería se construye alrededor del proceso vital del ser
humano, y que los conocimientos deben ser aplicados en la práctica de los
cuidados. Concebía la enfermería como arte o ciencia, identificando una única
base de conocimientos procedente de la investigación científica y el análisis
lógico que puede trasladarse a la práctica. Estableció la importancia de la
investigación que perdura hasta la actualidad.
Callista Roy (1970) suponía que el hombre es
un ser biopsicosocial que vive dentro de un entorno, que junto con la
personalidad influye en él, provocando el desarrollo de formas de adaptación.
La atención del enfermero sería necesaria cuando dichas respuestas fuesen
ineficaces. Peplau, Rogers y Roy se engloban en los llamados modelos de
interrelación, que son los más recientes y avanzados.
Sistema de Enfermería
Estructura Sanitaria de
enfermería

Cada país tiene su propia estructura de la red asistencial, pero básicamente casi todos concuerdan en tener Centros de Salud, Hospital de Zona o Rural, Hospital Provincial y Hospital de Referencia u Hospital Central, siendo la mayor parte de estos últimos de formación o universitarios.
Se pueden identificar un Nivel Primario
de atención en que estarían los Centros de Salud, rurales o urbanos. Un Nivel
Secundario en que localizaríamos los hospitales, de Distrito, Rurales,
Generales o Provinciales y un nivel terciario con los hospitales Centrales.
Puede suceder que en alguna estructura sanitaria existan los hospitales
especializados para una sola especialidad o patología, pero esto es
excepcional, o cuanto menos sorprendente, que en Zonas de Menor Desarrollo se
de esta posibilidad, salvo que las diferencias sociales sean enormes.
Centros
de Salud: Los Centros de Salud
(CS) se pueden clasificar en Urbanos y Rurales.
El
Centros de Salud tipo I es
más especializado dentro del medio rural y puede atender una población de
16.000 a 35.000 habitantes. La problemática del personal que atiende los CS
rurales es su escasez, aislamiento y falta de reciclaje técnico, con lo que las
lesiones esqueléticas quedan sin diagnosticar y su transferencia a otro centro
se demora, o no se realiza.
Los CS urbanos son de tres tipos (A, B,
C) conforme la población a servir en un radio de 1 a 4 Km. (esto suele cambiar
por países) y acostumbran a tener maternidad.
El
Centros de Salud tipo II es
la unidad de salud más pequeña que dispensa cuidados de salud primarios en el
medio rural. La población que atiende puede oscilar entre 7.500 y 20.000
habitantes. Está atendida por un Agente de salud y una enfermera. Se debe poder
diagnosticar la importancia o gravedad de una lesión músculo-esquelética para
decidir su traslado al centro superior.
Los
Centros de Salud
Tipo
A es el más especializado
en el medio urbano (40.000 a 100.000 habitantes) y puede disponer de Médico
generalista, así como Técnicos no quirúrgicos.
Tipo
B puede disponer de
Técnico en medicina con formación en la atención de lesiones musculo
esqueléticas.
Tipo
C es la unidad sanitaria
más pequeña que dispensa cuidados de salud en el medio urbano (10.000 a 25.000
habitantes en un radio de 4 Km).
Funciones de Enfermería
Asistencial:
Detectar necesidades.
Identificar y valorar recursos. Planificar, ejecutar, evaluar curas. Utilizar
metodología propia. Independientes – Propias Interdependientes – Compartidas
Dependientes – Delegadas.
· Programas de Salud: niño
sano, escuela, mujer, adultos, laboral.
· Seguimientos crónicos.
· Desarrollo habilidades.
· Prevención ETS.
· Rehabilitación y
reinserción
Docente:
Diseño programas
específicos. Orientar en la utilización de los recursos. Organización de las
actividades multidisciplinarias. Identificar necesidades de formación.
Divulgación de los avances.
Actividades Docentes
·
Estrategias educativas.
·
Formación continuada.
·
Formación pre-postgrado.
·
Desarrollo académico
disciplina enfermería.
·
Implicar enfermería
Investigación:
Potenciar búsqueda
propia. Protocolos basados en la evidencia científica. Indicadores de calidad
asistencial Pertinencia. Viabilidad. Eficiencia. Ética.
Actividades de búsqueda
·
Liderazgo de proyectos de
enfermería.
· Capacidad autocrítica y
buscar excelencia profesional.
·
Buscar nuevas fórmulas
asistenciales y educativas.
·
Avanzar en el diagnóstico
enfermera
Administrativa: Coordinación: niveles asistenciales. Planificar: prioridades y objetivos. Organizar: actividades y servicios del personal. Dirección: equipo asistencial Control y evaluación: objetivos.
Actividades
de Gestión
·
Elaborar protocolos.
·
Controles de calidad.
·
Cobertura de servicios.
·
Contrato-programa: por
objetivos.
·
Participación
multidisciplinar.
Enfermería Comunitaria como agente de
cambio

Gestión de cambio en enfermería

Las enfermeras, para ser agentes de cambio,
deben comprender la naturaleza social de las instituciones en donde trabajan
así como la naturaleza y la velocidad de los cambios sociales que contribuyen
significativamente para modificar los procesos de internalización de valores o
socialización organizacional. Esta visión global permite comprender e impulsar
el cambio, desde una dimensión más amplia y en sintonía con la cultura
organizacional.
Rol
del profesional de Enfermería
La enfermería se ha
autoidentificado como una profesión humanista, que se adhiere a una filosofía
básica centrada en el ser humano y su interacción con el entorno, donde la
persona elige, se autodetermina y es un ser activo. El objetivo de la
enfermería debe ser, esencialmente, para el beneficio del paciente, y su
trabajo debe estar centrado en él.
Desde el punto de vista de la autora, las intervenciones de enfermería
se pueden clasificar principalmente en cuatro categorías, que afrontan las
demandas del cliente: 1) cuidado; 2) competencia; 3) servicios de información y
asistencia jurídica, y 4) conexión. El objetivo del cuidado debe ser promover
el proceso de aprendizaje que permita al paciente ser activo en su
rehabilitación o promoción de su propia salud, mediante cambios en sus hábitos
o transformando las condiciones ambientales que le afectan.
El profesional en enfermería debe ser la
conexión o unión entre los profesionales de la salud, el paciente y su familia.
Esta función tiene por objetivo la integración de los esfuerzos y la prevención
de la fragmentación de los servicios de salud asociada a la especialización.
Aspectos Éticos Legales
de Enfermería
Ética de Enfermería: Estudia la forma en que nuestras
decisiones profesionales afectan a los demás, su relación con las reglas
morales y la naturaleza de las relaciones entre personas.
Respeto a las personas: Este principio nos conduce a que
debemos respetar a las personas sin distinción de raza, sexo, estado civil,
credo, política, respetar sus decisiones, respetar su vida, respetar su
dignidad, su individualidad.
Beneficencia: Nos dice que todas las intervenciones
de enfermería deben conducirse a hacer el bien, defender la vida y brindar
cuidados que ayuden al usuario a restablecerse en su proceso de enfermedad,
como también para su familia y las
demás personas con las que interactúan.
Objetividad: Este principio expresa que el personal
de enfermería debe ser honesto, justo, y estar libre de todo conflicto
personal cuando dirige las
intervenciones de enfermería en el cuidado a los usuarios.
Integridad: Este principio guía al personal de
enfermería a actuar con el mayor sentido de moralidad y responsabilidad, y que
el comportamiento del mismo debe ser de mucho profesionalismo.
Aspectos legales en la
práctica de enfermería
La responsabilidad legal del
profesional de enfermería es un tema que cada vez adquiere mayor importancia en
la práctica diaria. Esto es fácil de entender si consideramos, por un lado, que
la salud es uno de los bienes más preciados en la vida humana.
Iatrogenia o Mala
Práctica: Se refiere al efecto
dañino o perjudicial que resulta directa o indirectamente de la actividad
diagnóstica o terapéutica del equipo de salud.

El profesional de enfermería puede producir iatrogenia, y ésta puede
deberse principalmente a tres causas:
·
Negligencia: Se refiere al descuido, a la omisión o
abandono del paciente que le provoque un daño.
·
Ignorancia: Cuando no se cuenta con los
conocimientos necesarios y esperados en un profesional de enfermería para
prestar un servicio que ofrezca seguridad a los usuarios.
·
Impericia: En el caso que nos ocupa, se refiere a
la falta de habilidad del profesional de enfermería para aplicar en el paciente
los procedimientos necesarios durante su atención y que son atribuibles a su
ámbito disciplinar.
De una mala práctica de enfermería pueden derivarse tanto conductas
tipificadas como delictivas, las que a su vez pueden ser de dos tipos:
·
Delito culposo: Es aquella conducta ilícita y
delictiva en la que se ocasiona daño a otra u otras personas, pero en la que no
hubo la intención de dañar (puede deberse a negligencia, ignorancia o
impericia).
·
Delito doloso: En este caso la conducta ilícita y
delictiva tuvo intencionalidad. Esto es, que el daño se ocasionó de manera
consciente y voluntaria.
Desde el punto de vista del Derecho
(civil y penal), se considera “responsable” a un individuo, cuando de acuerdo
al orden jurídico, es susceptible de ser sancionado. La responsabilidad
jurídica siempre lleva implícito un “deber”. El deber u obligación legal es una
conducta que de acuerdo a la ley, se debe hacer u omitir.
La responsabilidad legal señala quién debe responder ante el cumplimiento
o incumplimiento de tal obligación.
Causas de Responsabilidad Civil
Ø Responsabilidad
por los hechos propios:
Cada quién es responsable de su propia conducta.
Ø Responsabilidad
por hechos ajenos: Se refiere a la
responsabilidad de las personas de evitar que otras cometan hechos dañinos. Al
respecto, hay dos grupos por los cuales se debe ser responsable: En el primero
están los niños y los incapacitados (por ejemplo: Los padres son responsables
de los actos de sus hijos).
En el segundo están los daños
causados por empleados y representantes. Tiene que ver con la selección del
personal y con la supervisión técnica o administrativa del mismo, entre otros.
Ø Responsabilidad
por obra de las cosas: Se
considera que si el daño fue causado por cosas u objetos, el dueño de ellos
será responsable de las consecuencias.
Responsabilidad Penal

El ejercicio profesional de enfermería conlleva el riesgo de incurrir en conductas que constituyen infracciones a la normatividad jurídica. Este tipo de faltas en su mayoría, están establecidas en el Código Penal Federal y en las leyes reglamentarias, relativas al ejercicio de las profesiones, y en un momento dado, aunque no haya una legislación específica, pueden aplicarse a la enfermería.
Debido a la naturaleza propia de la práctica de enfermería, los casos
legales en los que con mayor frecuencia puede involucrarse el profesional de
enfermería son:
Ø Revelación
de secretos: Se trata de una falta
grave y se refiere a la revelación de información de tipo confidencial,
confiada a la enfermera (o), por parte del paciente (Título Noveno).
Ø Responsabilidad
profesional: Se refiere a la comisión
de actos delictivos, ya sean dolosos o culposos, durante el ejercicio
profesional (Artículo 228).
Ø Falsedad: Se refiere a la falta de veracidad en
el manejo de datos, información, documentos o al rendir declaraciones ante una
autoridad (Artículo 246).
Ø Usurpación
de profesión: Se aplica a aquellos
casos en que sin tener un título y una cédula profesional para ejercer una
profesión reglamentada, se atribuya el carácter de profesionista, realice actos
de esa profesión y ofrezca públicamente sus servicios con el objeto de lucrar
(Artículo 250).
Ø Lesiones
y homicidio: Es el punto más delicado
y trascendente del trabajo en que el profesional de enfermería puede incurrir.
Puede tipificarse como culposo o doloso, dependiendo de las circunstancias ya
mencionadas anteriormente (Artículos 288 y 302).
Ø Aborto: Es uno de los hechos que se pueden
encontrar altamente relacionados con el trabajo de enfermería. El artículo 331
(Código Penal Federal) establece la suspensión del ejercicio profesional por un
período de 2 a 5 años, además de otras sanciones.
Ø Abandono
de personas: Se refiere a la no
atención de personas incapaces de cuidarse a sí mismas (niños, ancianos, etc.,
o a las personas enfermas), teniendo obligación de cuidarlos (Artículo 335).
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